sábado, 11 de noviembre de 2017

Cuando el mítico Marcial Lalanda trabajó de albañil en la estación de tren de Toledo

Nunca dejaré de sorprenderme por la capacidad que tienen las fotografías antiguas de unir a personas del presente y del pasado a partir de un recuerdo.
Hace unos años, cuando publiqué la entrada dedicada a la construcción de la Estación de Ferrocarril de Toledo, incluí una fotografía en la que aparecía el arquitecto que dirigió las obras. No me refiero a Narciso Clavería, que fue el que diseñó el edificio, sino al arquitecto que dirigió los trabajos en el día a día, algo así como el aparejador (hoy arquitecto técnico). Ese personaje no era otro que el francés Edouard Hourdillé, quien aparecía luciendo un poblado bigote en una de esas imágenes tomadas por el fotógrafo F. Salgado (es el segundo por la derecha):
El arquitecto E. Hourdille en las obras de la estación de Toledo © Archivo Histórico Ferroviario del Museo del Ferrocarril de Madrid. Fotografía de F. Salgado. Signatura 0432-IF MZA 0-5

Pues bien, hace unos meses recibí uno de esos mensajes por el messenger de Facebook que te alegran el día...y el mes. Nada más y nada menos que el bisnieto de Edouard Hourdillé contactaba conmigo. David Pinaquy Hourdillé, que así se llama (y a quien nunca agradeceré suficientemente su generosidad), me comentaba que conservaba unas fotografías de 1916 en las que aparecía su bisabuelo Edouard durante la construcción de nuestra preciosa Estación de Ferrocarril. Intercambiamos nuestros correos y quedó en enviarme el material. Así hizo.
Cuando abrí dicho correo y descargué los datos adjuntos, no imaginaba que una sorpresa aún mayor me estaba esperando. En una de las fotografías, en las que aparecía un nutrido grupo de trabajadores de la obra de la estación, estaba hecha una anotación por parte del propio Hourdillé: "Marcial Lalanda, matador célébre 1920-1930":
Marcial Lalanda y otros obreros posan con Edouard Hourdillé en 1916 durante la construcción de la Estación de Ferrocarril de Toledo.  Donación de David Pinaquy Hourdillé.
Marcial Lalanda en 1916 durante la construcción de la Estación de Ferrocarril de Toledo.  Donación de David Pinaquy Hourdillé.

De la manera más inesperada, había llegado a mis manos la noticia de que uno de los toreros más famosos de la historia había sido albañil, con tan solo 13 años, en la estación ferroviaria toledana.
Y todo encajaba: la fotografía deja claro su parecido con el personaje que se hizo célebre y además sabemos que Lalanda había estado en Toledo como una de las primeras ciudades donde hizo sus "pinitos" como novillero. Así, he podido comprobar que Marcial Lalanda, en la temprana fecha del 14 agosto de 1914, con solo 11 años, mata por primera vez y en público un becerro en Alameda de la Sagra, cobrando por ello 35 pesetas con cuarenta céntimos. En la plaza de Toledo capital se presentó el 8 de noviembre del mismo año 1914. En los años 1915 y 1916, fecha en la que fue tomada la foto, Lalanda no puede torear en público por una Disposición Ministerial que prohibía torear a los menores de dieciséis años.
Marcial_Lalanda

En los años 20 y 30 Lalanda se convirtió en un verdadero mito, la estrella indiscutible del escalafón taurino, dando lugar al conocido pasodoble "Marcial eres el más grande" en 1932.
Cuando estalló la Guerra Civil entró en Francia con el pretexto de participar en algunas corridas, pero pronto volvió a España, a la zona franquista, y se alistó en las milicias falangistas. Al parecer, el destino volvió a unirle con Toledo, entrando con las tropas sublevadas en la ciudad a finales de septiembre de 1936 para acabar con el asedio del Alcázar. De hecho, se conserva una fotografía de las tropas nacionales recién tomado el Alcázar en el que aparece un hombre con un parecido asombroso a Lalanda. Juzgad vosotros mismos:
Tropas nacionales tras tomar el Alcázar a finales de septiembre de 1936
Parecido entre Marcial Lalanda y un soldado franquista que formaba parte del grupo que tomó el Alcázar

Lalanda había sufrido heridas en una pierna en el frente a su paso por Talavera, y la guerra marcó mucho a su familia, con hasta doce muertos: su primo Pablo, antiguo matador, junto a sus hermanos Martín, Marcial, Salvador y los hijos de este, fueron ejecutados en su propia finca, cerca de Toledo, por las milicias republicanas.
Retirado en 1943, se dedicó a la ganadería de reses bravas, falleciendo en octubre de 1990 con 87 años.

Volviendo al origen de la fotografía, el arquitecto Edouard Hourdillé guardó también otros recuerdos de su paso por Toledo, como por ejemplo un reconocimiento del ayuntamiento por su buen trabajo durante las obras:
Diploma del Ayuntamiento de Toledo a Edouard Hourdillé en 1920.  Donación de David Pinaquy Hourdillé.

También conserva la misma foto de F. Salgado que en su día publiqué, con el dato añadido de saber que el niño era su hijo, el abuelo de David:
Edouard Hourdillé y su hijo con miembros de la obra de la estación de ferrocarril de Toledo en 1916. Foto de F. Salgado.  Donación de David Pinaquy Hourdillé.

Esperando que esta increíble historia que une a dos personajes que, en principio, nada tenían que ver os haya gustado, me despido con una foto de Hourdillé en 1908 y con la letra del famoso pasodoble, que puede que a partir de ahora os venga a la cabeza cada vez que cojáis el tren en Toledo:
Retrato de Edouard Hourdillé. Donación de David Pinaquy Hourdillé.

MARCIAL, ERES EL MÁS GRANDE
Martín Domingo - Josefina Porras

Voy a los toros
porque esta tarde Marcial torea,
que es el mas grande,
y sus faenas, derroche de emoción,
son todo arte, valor y corazón.

Con el capote no tiene rival,
en banderillas es algo genial
y con la espada fue su profesor
otro de Madrid, Vicente Pastor.

ESTRIBILLO:
Marcial, eres el mas grande,
se ve que eres madrileño,
rival de Belmonte, José,
Machaquito, Pastor y El Algabeño.

Por ti vamos a los toros,
por ti solo hay afición.
Marcial, si te retiras,
perderá la Fiesta toda su emoción.

Sale el toro,
Marcial lo citas
y da seis lances
que maravillan
y de remate nos da su creación,
la mariposa, con limpia ejecución.
La plaza entera grita loca olé,
al sucesor del divino José.
Eso es honrar la Fiesta Nacional.
¡Qué viva Madrid!
¡Qué viva Marcial!

ESTRIBILLO
© TOLEDO OLVIDADO
Maira Gall